Una de las preocupaciones más frecuentes de las personas adultas, es velar por la integridad de su familia, y sobre todo pensar en cuales serian los padecimientos económicos que podrían atravesar sus seres queridos, si le llegara a pasar algo o pudiera fallecer.
Definitivamente el temor recae, en la diversas angustias o crisis que pueda atravesar su conyugue y los hijos, cuando se vean sin dinero para que pueda suplir los gastos del entierro, las deudas de la casa y la subsistencia diaria.
Para disipar todo este tipo de angustias, aparecieron los Seguros de Vida que actúan a manera de resguardo si se trata de enfrentar apremios económicos, además de entregar una suma de dinero a manera de beneficio por la muerte del asegurado o cabeza del hogar.
¿son importantes o no?
Mediante la firma del contrato con la aseguradora, el asegurado está obligado a pagar unas primas o pólizas de manera mensual o anual. Estas pólizas pueden ser acumulados como ahorros que podrían ser utilizados en el futuro para complementar su jubilación o el uso que deseo conveniente el asegurado.
Al principio los Seguros de Vida, fueron tomados como algo violentos, ya que se habla de la muerte de uno mismo, que a la larga beneficiara a tus seres más queridos.